Las ventanas y aberturas de vidrio de gran tamaño son cada vez más comunes, al mismo tiempo que aumentan las preocupaciones por la seguridad. Es fundamental que estos espacios proporcionen comodidad y tranquilidad a sus usuarios, garantizando la seguridad física en caso de accidentes.
Las dos opciones más comúnmente utilizadas para el vidrio de seguridad son el vidrio templado y el vidrio laminado. El vidrio templado, cuando se rompe, se fragmenta en pequeños trozos no afilados, minimizando el riesgo de lesiones. Por otro lado, el vidrio laminado consta de dos capas de vidrio unidas por una lámina extremadamente resistente, que retrasa cualquier intrusión y mantiene los fragmentos de vidrio adheridos a la lámina en caso de rotura.
Estas soluciones transparentes no comprometen la entrada de luz natural y, además, se pueden combinar para aumentar aún más la seguridad. Con el compromiso de combinar seguridad y comodidad, Divilux se esfuerza diariamente por ofrecer las mejores soluciones para sus clientes.